Ubicado en Alfafara, pueblo que le da nombre en la variedad de aceite más potente de las nuestras, el restaurante hace cocina contemporánea que reivindica con elegancia los productos de la zona.
En septiembre del año pasado, en época de semiconfinamiento, comimos en Alfafara, un pueblecito pequeño y muy acogedor que está entre Bocairent y Agres.
La comida estuvo muy bien, Paqui Pascual a la cocina y David Navarro en la sala se preocupan y se ocupan de tener productos de primera categoría y elaborar con ellos platos que se lo valen.
Me gusta hacer el ejercicio de recordar, en el jefe de un tiempo que he estado en un restaurante, los platos que comimos. Solo me recuerdo, la mayoría de vueltas, de aquellos platos que más me han impresionado. Es sorprendente comprobar como a los recuerdos les cuesta ubicarse y más si los platos que has probado en un restaurante se han repetido en algún otro de manera similar, pienso que el cerebro desestima el recuerdo si no vale demasiado la pena, debe de ser por falta de espacio supongo.
Pero al caso, los platos que se me quedaron grabados en la memoria y que después he intentado hacer en casa, son dos platos de paloma, o mejor de pichón. Uno era un arroz caldoso, que vaya, de aquí al cielo y el otro el pecho o magret de pichón, un plato excelso. Comentando con un amigo sobre el sabor de la paloma me dice «Es un sabor tan potente el de la paloma que diría que es umami» y pienso que tiene toda la razón, tiene un sabor fuerte a caza, una intensidad que se acerca a la del hígado, pero diferente.
Cómo estamos en el pueblo que le da nombre a la variedad más potente de las valencianas, la alfafarenca, no podíamos más que empezar por una cata de aceites. Soy un asiduo a consumir este aceite, es intensísimo, con la variación de si está hecho de olivas verdes o maduras, los dos son buenos, eh. Es un aceite en el cual el amargor y el picor se muestran en perfecto equilibrio. Si os gustan los aceites potentes, probadlo.






Ensaladilla con alga nori ahumada. La ensaladilla está perfecta y la sensación cuando la comes es como que descansa en la boca sobre una cama de humo. No había sentido nunca esa sensación, es muy refrescante y placentera.


Una verdadera maravilla, la calidad del huevo, con los rebozuelos, perretxicos y la trufa de verano es una gran combinación. Todo pide calma y tiempo para saborear.

Después de un bloody mary para limpiar las papilas entramos con un vino tinto suave, ligero, el Sensal también de Javi Revert, un vino poco convencional, de giró, arco, bonicaire y alguna más, todas autóctonas, fermentado con tonel y en ánfora. Es un vino poco denso «la prueba la tenéis en que habéis bebido poca agua, en un vino denso, como hay muchos, se hubistos hubieséis acabado el agua, es muy fresco» dijo David.






David se ha criado en la Valleta, en plena naturaleza, entre cultivos, rebaños y pequeñas granjas, es un amante de la natura. La curiosidad y el ansia de saber lo lleva a una formación continua. Los vinos, los productos de la zona como los aceites, es elaborador de un aceite de alfafarenca ecológico, la Micola, son su verdadera pasión. Nos confiesa que a lo largo del tiempo han tenido varias propuestas muy jugosas, pero tanto él como Paqui las han rechazado, cambiar una vida estresante y falta de la natura de estos pueblecitos de montaña que tanto valoran no es fácil.
Fotos: Adolf Boluda
CASA EL TIO DAVID
Carrer Barranc del Clot, 2 Alfafara
Tel.- 620 78 05 48

Cata en el restaurante Casa el Tio David. Precio 20€. Tel 620 78 05 48
Cata y visita a la almazara Alfaoliva y al bancal desde 5€. Tel.- 646 52 59 83
Masía del Cuco, experiencia gratuita a la almazara y a la finca pero solo disponible para profesionales. Tel.- 620 16 42 51

